El pasado viernes, vivimos una jornada que quedará grabada para siempre en la historia de la Fundación Isidre Esteve. Un evento que, más allá de los números, fue una auténtica lección de valores, de entrega y de humanidad.

Sergio se propuso un reto titánico: realizar el mayor número posible de repeticiones del ejercicio jerk con una kettlebell de 20 kg, durante un evento solidario que tenía un único objetivo: recaudar fondos para ayudar a las personas con discapacidad que participan en los centros de la Fundación Isidre Esteve. Y no solo lo logró, sino que superó todas las expectativas.

Con un total de 8.153 repeticiones, Sergio levantó 163.060 kg. Sí, has leído bien. Ciento sesenta y tres mil kilos en un solo día. Todo esto con un solo cuerpo, una sola voluntad, una sola idea en la cabeza: dar todo lo que tenía para ayudar a otros.

Pero la hazaña no fue solo física. Los momentos de dificultad llegaron, como siempre llegan en los retos de verdad. El dolor, el cansancio, el muro mental… Pero Sergio se sobrepuso a todos ellos. Apretó los dientes cuando las fuerzas flaqueaban, cuando el cuerpo pedía parar. Y en ese silencio en el que solo queda la voluntad, se mantuvo firme. Porque no había venido a batir un récord, sino a cumplir una promesa. A ser útil. A demostrar que una sola persona, cuando pone el corazón por delante, puede mover montañas.

Además, hay que decirlo, nadie en el mundo había sobrepasado las 12 horas levantando una kettlebell. Sergio, lo ha doblado. El maño de hierro. The «Iron mañ».

Gracias a su esfuerzo, se recaudaron más de 2.500 euros para seguir impulsando nuestros proyectos, actividades y entrenamientos adaptados. Pero más allá del dinero —que es necesario y que agradecemos profundamente—, Sergio nos regaló algo mucho más valioso: una inspiración.

Desde la Fundación Isidre Esteve, queremos darle las gracias públicamente. Gracias, Sergio, por tu gesta, por tu ejemplo, por tu humanidad. Por dar sin pedir nada a cambio. Por ofrecer tu tiempo, tu cuerpo y tu energía hasta el último aliento. Por mostrar que el compromiso, la empatía y el coraje todavía existen. Y por recordarnos que la solidaridad no es una idea abstracta, sino algo que se puede ver, tocar… y levantar, una y otra vez, como hiciste tú.

Gracias de todo corazón.

Y esto no termina aquí: aún puedes colaborar

Si quieres sumar tu grano de arena y apoyar esta causa, aún estás a tiempo.
Haz tu aportación solidaria a través de Bizum, con el código de envío a ONG:
📲 11659 (Fundación Isidre Esteve)

Tu ayuda, por pequeña que parezca, marca la diferencia.

Jerk kettlebell guiness record